PRESENTACIÓ SR. PEDRO ORTEGA

TOMAS VILÀ I PUIGDEMONT




Nacido en 1952 en Cellera de Ter (Girona) se presenta en E. Arimany Tomás Vilà i Puigdemont, un artista al que podríamos definir como multidisciplinar, pero enamorado siempre de los paisajes de la tierra, y en una etapa posterior, de los “cellers” típicos, de las bodegas y últimamente de las marinas. Sin duda es un artista de gran facilidad para conseguir que el nada fácil lenguaje artístico sea para él una forma natural de actuar, que convierte las telas que pinta en una especie de lenguaje natural, en el que se expresa el campo, los pequeños pueblos, las masías, las clásicas bodegas. Muy recientemente – el mismo nos lo podría decir – se ha publicado un libro titulado “El bosc dels somnis de colors”, que todavía desconozco.



Las calles de su tierra, los “cellers”, las botas de vino y la diversidad de objetos que en ellos pueden reunirse, son algunos de los objetos primeros de sus cuadros, realistas cien por cien, y otro tanto podríamos decir de su afición a las escenas nocturnas , a los pueblos con luciecitas en las ventanas y balcones, y a su amor la luna. Noche de luna en Pal, Noche de luna en Girona, son algunos de los temas más conseguidos. Perro tanto si las obras son de día o del anochecer, en todas hay profundidad, sin que por ello se olvide el artista de los primeros planos, en los que veremos aguas, flores y todo cuanto capta su pupila, que es la de un buen observador y un magnífico conocedor del oficio.

Pintar a la luz de laguna se ha convertido casi en una marca de la casa y de su manera de actuar en su profesión.

Y siempre adscrito a la figuración, con la que se basta y sobra para conseguir una obra de gran y grata intensidad artística, porque es un gran conocedor de algo que lleva mucho tiempo practicando, Los temas son algo suyo, le pertenecen y no tiene inconveniente alguno en mostrárnoslos. El, lo mismo que dialoga con la luna y las estrellas al anochecer sabe transmitir a su público esa difícil, pero a la vez fácil forma de entenderse con la naturaleza.

PEDRO J. ORTEGA